Las intentonas por limitar los derechos de las mujeres vinieron en cascada: el Partido Encuentro Social (PES) en la Presidencia de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, las autoridades del ITESO cancelan el “Diálogo en torno al Derecho a Decidir” y, en el extremo de la intolerancia, un grupo llamado “Motonetos al rescate” amenaza con linchar y prender fuego a defensoras de derechos humanos del estado de Chiapas.
Cuando se dio a conocer que el PES presidiría la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, los temores por la presencia conservadora en las coaliciones electorales se convirtieron en una realidad preocupante. Morena, en pleno control de la Cámara de Diputados, cedía la presidencia de una de las comisiones más relevantes en materia de derechos humanos a los representantes de un partido político no sólo extinto, sino claramente posicionado en contra de la salud y los derechos de las mujeres.
La alianza de Morena con el PES traía consigo el retroceso al dejar la puerta abierta a un grupo caracterizado por anteponer su ideología religiosa en todas sus iniciativas. Recordemos que el PES formó parte del bloque de diputados que votó a favor de reformar la constitución de Baja California para proteger la vida desde el momento de la concepción, redactó una propuesta para calificar como pornografía el contenido relacionado con la educación sexual en los libros de texto y utilizó el tema de la objeción de conciencia para entorpecer el acceso de las mujeres al aborto.
Para varias organizaciones feministas resultó alarmante que Morena no considerara la salud como tema prioritario y cediera al PES una comisión que requiere información científica y no ideológica. Por lo anterior, nos pronunciamos para que la salud de las mujeres se colocara al centro en el combate contra la desigualdad, la pobreza y la impunidad, y exigimos que los diferentes partidos políticos, en particular Morena que tiene la mayoría en la Cámara de Diputados, vigilaran y garantizaran que la presentación, discusión y aprobación de los temas en esa comisión se hiciera desde una perspectiva científica, de derechos humanos y de género.
La presión ciudadana, a través de las redes sociales y con la presencia en San Lázaro de diferentes organizaciones defensoras de derechos humanos y del Estado laico, finalmente logró evitar que un partido confesional presidiera la Comisión de Salud, y resaltó la necesidad de hacer marcaje personal a los responsables de legislar en materia de derechos sexuales y reproductivos.
Una integrante de nuestra organización quien a nombre de GIRE participaría en el “Diálogo en torno al Derecho a Decidir”, organizado por alumnas del ITESO, fue informada, la noche anterior al evento, de la cancelación del diálogo debido a que el rector había recibido una llamada del Cardenal.
En redes sociales circularon carteles anunciando que el evento había sido cancelado. Las autoridades del ITESO, por su parte, publicaron un comunicado diciendo que no había condiciones de respeto para llevar a cabo el diálogo y que para preservar la seguridad de la comunidad universitaria era mejor cancelarlo. Después circularon carteles anunciando que sí habría diálogo pero que se llevaría a cabo en otro lugar: el Parque Rojo, lo cual elevaba el riesgo tanto para las organizadoras como para las ponentes y las personas que asistieran.
A la mañana siguiente, nuestra compañera, nerviosa —y con varias recomendaciones para aminorar los escenarios de riesgo—, dado el nivel al que llegan las muestras de odio y animadversión hacia quienes están a favor de la despenalización del aborto, se encontró con la afortunada noticia de que la comunidad estudiantil había protestado por la censura del evento y que, dada la fuerza de la movilización, el rector se vio orillado a reestablecerlo y, además, a abrirle las puertas del auditorio principal de la universidad.
Para GIRE fue muy grato ver a las y los jóvenes, con sus pañuelos y playeras verdes, abarrotando el auditorio. Su participación fue apabullante: quedó claro que la marea verde en México se robustece y que no se le dará cabida a la censura que busca limitar los derechos humanos de las mujeres.
Defensoras de derechos sexuales y reproductivos en San Cristóbal de Las Casas, Chiapas denunciaron las amenazas que recibieron, desde marzo de este año, por parte de un grupo llamado “Motonetos al rescate”, debido a las acciones colectivas que realizan en apoyo a las activistas por el aborto legal y seguro en América Latina. De acuerdo con un comunicado, donde dan a conocer el número de muertes relacionadas con el aborto inseguro, las defensoras fueron amenazadas con lincharlas y prenderles fuego en la marcha que realizarían el Día de Acción Global por un Aborto Legal, Seguro y Gratuito. Ante esto, las defensoras hicieron un llamado a la sociedad civil para apoyar las acciones del 28 de septiembre y se pronunciaron por la autonomía y la libre decisión de las mujeres.
Frente a las intentonas de limitar los derechos humanos no podemos bajar la guardia. Reiteramos que la agenda del nuevo gobierno requiere políticas públicas de salud laicas, basadas en evidencia científica y en estándares internacionales de derechos humanos. En la lucha por que el Estado garantice los derechos de las mujeres no podemos perder de vista que hay que emprender acciones colectivas y organizadas desde diferentes espacios, porque está claro que tanto en el ámbito legislativo como en la academia, las calles o las redes sociales, los derechos de las mujeres siempre están en riesgo.