En el ámbito laboral, los roles y estereotipos de género basados en preconcepciones de lo que deberían hacer las mujeres y los hombres en sociedad conllevan a una forma de división del trabajo que consiste en la asignación de tareas y espacios con base en el sexo de las personas. Una de las consecuencias de la división sexual del trabajo es la llamada “doble jornada”, término que se utiliza para designar a la imposición de una carga extra de trabajo en el hogar a las mujeres, no remunerada y adicional a la del empleo remunerado que desempeñan, la cual limita sus posibilidades de desarrollo.
De acuerdo con el INEGI, al tercer trimestre de 2022, el tiempo empleado en labores domésticas y de cuidados disminuyó, pero sólo para los hombres: las mujeres reportan un total de 20 horas semanales en 2022 y 2021, mientras que para los hombres disminuye 5 horas en cuidados y aumenta 4 en labores del hogar.
La siguiente gráfica refiere el número de horas por semana que mujeres y hombres dedican a los trabajos domésticos y de cuidado no remunerados en México.
Fuente: INEGI, Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), tercer trimestre de 2022.