En Estados Unidos la guerra por el control del cuerpo de las mujeres continúa. En este nuevo capítulo el presidente Trump ha bloqueado el acceso de Planned Parenthood a 266 millones de dólares. Esto significa que la organización dejará de prestar servicios de salud reproductiva a las poblaciones más vulnerables, como las mujeres latinas y negras. Planned Parenthood respondió con la campaña #BansOffMyBody, donde más de 140 artistas se sumaron a concientizar sobre la importancia de garantizar el aborto legal en Estados Unidos. Resaltan las voces de cantantes pop como Lady Gaga, Billie Eilish y Ariana Grande.
Durante su campaña presidencial Trump consiguió el voto evangélico asegurando estar en contra del aborto y que haría lo necesario para obstaculizar el acceso a este servicio. Desde ese momento, Planned Parenthood se volvió la principal antagonista en esta lucha. Es necesario precisar que Planned Parenthood es la más grande proveedora de servicios de salud reproductiva en Estados Unidos a través de 600 centros de salud. Planned Parenthood es una organización independiente, sin fines de lucro que además brinda educación y moviliza a jóvenes activistas alrededor de este tema. El año pasado el presidente Donald Trump buscó eliminar los fondos para Planned Parenthood en el presupuesto federal, pero no lo logró, pues enfrentó la objeción de los demócratas y no consiguió los votos necesarios.
Lo que sí logró el presidente Trump fue limitar el financiamiento a organizaciones internacionales con lo que fue conocido como la “Ley Mordaza Global” en 2017 y, oficialmente, como la “política de la Ciudad de México”. Esta iniciativa, originalmente impulsada por el Presidente Reagan y cancelada por el presidente Clinton, consiste en condicionar el financiamiento a organizaciones que provean servicios de interrupción del embarazo, incluyendo a quienes informen sobre el aborto terapéutico o de la atención postaborto.
Este año, Trump consiguió eliminar el acceso de Planned Parenthood al programa federal de planificación familiar, conocido como Título X, parte de la Ley federal de Servicio de Salud Pública de la Ley federal del Servicio de Salud Pública. Este programa brinda exámenes preventivos de cáncer, infecciones de transmisión sexual y servicios de anticoncepción integral. Planned Parenthood es el único proveedor de servicios de anticoncepción en lugares remotos de Estados Unidos. La organización dejó de proporcionar estos servicios en Texas, Iowa y Missouri, cuando se eliminó el financiamiento que brindaba el programa Medicaid.
La campaña #BansOffMyBody que en español sería algo como “fuera prohibiciones de mi cuerpo” reúne a más de 140 artistas para pedir el acceso al aborto legal en Estados Unidos. Artistas como Ariana Grande, Lady Gaga, Billie Eilish, Miley Cyrus, Demi Lovato, Katy Perry, Nicki MInaj, Dua Lipa, SIA, Katy Perry, Fiona Apple, Pussy Riot y muchas otras de la generación millennial se solidarizaron con la causa. La campaña se puede encontrar en el sitio web con el mismo nombre y es posible suscribirse y participar contando la historia propia sobre aborto.
“Nuestros cuerpos son nuestros, si no lo son, no podemos ser verdaderamente libres o iguales. En todo el país, algunos políticos están tratando de tomar decisiones sobre nuestros cuerpos por nosotras. No dejaremos que las prohibiciones del aborto arrasen el país y pongan en riesgo nuestras vidas y nuestro futuro, y no seremos silenciadas mientras nos quitan nuestro derecho fundamental a controlar nuestros cuerpos. Todas las personas merecen atención médica libre de vergüenza, estigma o juicio. Juntas decimos: ‘¡Fuera las prohibiciones de mi cuerpo!’”.
Resalta esta campaña por el el perfil de las celebridades y artistas que se sumaron a ella. No se trata ya de artistas independientes o alternativos, sino de aquellas que forman parte de la generación miilennial y que tienen un impacto global en la generación más joven. Ya hemos visto por parte de varias artistas expresiones catalogadas como “feminismo pop”, destacando particularmente Beyonce. Sin embargo, ésta es la primera vez que tantas artistas se suman a una iniciativa lanzada por una organización con un trabajo comunitario tan consistente.
En México, donde igualmente enfrentamos una oleada conservadora antiderechos que busca eliminar en los hechos el acceso al aborto legal, pocas artistas pop se han expresado a favor del aborto. Resalta que Paulina Rubio, se unió a la campaña #BansOffMyBody en Twitter. Esperamos que en nuestro país cada vez más voces se sumen y ayuden a la juventud a tener argumentos a favor de los derechos humanos y contra el estigma. Especialmente en el contexto de una embestida contra los derechos reproductivas como la que estamos viviendo.
