Somos un blog con harto limón y feminismo. Nuestros temas favoritos son autocuidado, diversidad, menstruación, maternidad, infancias, amor romántico, política, derechos reproductivos y mucho más. ¡Ponle limón a tus días leyendo nuestras publicaciones!
Mi celular empezó a explotar con notificaciones de Telegram a principios de enero. Otra persona que se había sumado. Mientras tanto, los tíos y tías inundaron los chats familiares.
Pasan los años y los tíos siguen reenviando mensajes de «NO AUTORIZO que Facebook utilice mis mensajes y fotos de whatsapp en un juicio en mi contra NO, NO y NO cien veces. Compártelo a veinte personas para que tenga efecto, si son diecinueve, no vale.»
— covid 3000 (@robotfantasma) January 15, 2021
Whatsapp había publicado sus nuevas políticas de privacidad que entrarían en rigor el 8 de febrero y esto provocó una ola de usuarios hacía otros servicios como Signal o Telegram. Poco después Whatsapp anunció que iba a posponer esas políticas debido a la respuesta de millones de usuarios. Pero… ¿Qué demonios significan esas políticas? ¿De verdad son nuevas? ¿Telegram es mejor? ¿Qué tiene que ver esto con los movimientos sociales y en particular el feminismo?
Entre contactos tuve la oportunidad de entrevistar a “Mo”, “Jabón Líquido” y “Niculcha” … tres hackers feministas de Costa Rica para que explicaran a una pobre inepta de la tecnología como yo, qué demonios está pasando.
Es una colectiva que surgió hace 10 años con la idea de aprender de tecnologías libres que en Costa Rica no nos enseñaban en las universidades. Al inicio era muy técnico el asunto pero a partir de allí empezamos a conseguir proyectos y trabajos que alimentaban lo que aprendíamos y empezamos a compartir ese conocimiento. Formamos una comunidad y el primer encuentro centroamericano de software libre fue en 2009.
Nos interesa el tema de la libertad de conocimiento y del derecho al conocimiento.
En realidad no ha cambiado prácticamente nada. Es algo que ya hacían desde mucho antes y que ahora quieren legalizar. Estamos a disposición de que esa empresa decida sin entender cómo funciona, y a la vez un poco forzadas a utilizarlas porque nuestras redes de personas queridas están allí. Si queremos comunicarnos con ellas, no hay mucha opción.
Con Whatsapp, desde sus inicios, hasta cuando Facebook la adquirió, había censura y no existía la privacidad. En realidad hay muchos puntos en contra de esta aplicación y más cuando analizamos la corporación detrás [Facebook], encargada de la aplicación y los datos.
Lo que nos sorprendió es que atrajo mucha atención. No nos extraña que más personas están migrando a otras herramientas. Está bueno el momento para discutir, entender…
El punto es que es una caja negra donde no sabemos nada de cómo funciona por dentro.
Lo único que sabemos es que es un negocio de mercadeo que nos está usando como producto para vender anuncios a otras empresas que luego nos venden anuncios a nosotros.
Cuando decimos por ejemplo, que no quiero compartir mi ubicación con otras usuarias de la aplicación, en ningún momento estamos diciendo, “No quiero compartir esta información con Facebook.” Facebook tiene toda esta información y después esconde alguna. No la muestra.
En estos términos que ahora se volvieron visibles en WA, básicamente lo que dice es que pueden usar toda nuestra información para generar un perfil para después compartirlo con otras empresas. No podemos hacer nada, nada más nos queda aceptar estos términos o dejar de usar la aplicación. Con el anuncio de sus políticas dijeron: “Les estamos recordando que esto es lo que hacemos.”
Ahora, eso no quiere decir que una app de Software Libre va a ser perfecta.
Hay una metáfora muy buena sobre el software libre. Decidimos ir a comer a un restaurante. En uno nos dan la opción de ver la cocina, la receta, como hacen los alimentos, como preparan el plato, y, ¡comamos! En otro restaurante, nos dicen que no podemos ver la cocina ni como se hace la comida, ni la receta, ni los ingredientes. Entonces, ¿a cuál de los dos nos gustaría ir? El software libre es la posibilidad de poder entrar a la cocina, ver el código fuente, ver la receta de cómo se hizo y hacer nuestra propia modificación, o versión para mejorarlo o simplemente volver a cocinarla. Es libertad, es compartir. Y esa confianza y crear conocimiento de manera colectiva es lo que hace que el software libre tenga sentido como algo comunitario de transparencia y de libertad, cosa que en el otro lugar no la tenemos. En términos sencillos, eso es el software libre.
La diferencia con una aplicación de software libre es que, para las personas de nuestras comunidades que sepan programar, van a poder analizar y entender qué hay detrás y cómo funciona. De allí tomamos una mejor decisión de si la usamos o no. Entonces, en la mayoría de los casos, vamos a tener el interés de la comunidad antes del interés corporativo.
Tiene todo que ver. Desde la construcción misma de estas tecnologías … ¿Para quiénes son? ¿Quiénes los hicieron? Toda la construcción del mismo código viene de hombres blancos del norte global. Entonces desde allí estamos luchando por la igualdad social y la tecnología está completamente sesgada. Son tecnologías que no están diseñadas para nuestro contexto o realidad.
Muchas de nosotras somos activistas, o trabajamos en organizaciones de la sociedad civil, y terminamos utilizando no solo Whatsapp, sino todas esas herramientas para nuestras campañas y a veces es terminar comiéndonos la cola porque terminamos tratando de buscar cambios estructurales utilizando las mismas herramientas del sistema.
Agregamos que Whatsapp no es nuestra aliada. Facebook como tal no es un aliado del feminismo. Muchas herramientas se han utilizado para violentarnos. Te podemos contar de algunos casos. Nos han llegado de varios países de Latinoamérica, sobre todo con el tema de derechos sexuales y reproductivos. Con el tema de la despenalización del aborto, personas u organizaciones que han recibido ataques masivos o cancelación de cuentas. Además hay una masa de bots para hacer contenido en contra del aborto. Es increíble que haya grupos antiderechos financiados para poder hacer o usar la tecnología para atacar y posicionar sus discursos en las tendencias.
Estas redes o aplicaciones no están diseñadas para que conozcamos verdades, ni una discusión constructiva, sino para generar dinero. Entonces el grupo con más dinero va a poder pagar más anuncios y va a poder manipular hacia dónde va la discusión.
Cuando damos talleres, esa pregunta en particular es algo comùn. Lo que les decimos es, ¿Qué pasa si dejas la puerta abierta de tu casa porque no tienes nada que esconder? Alguien puede meterse a tu casa, a tu cuarto, a tu baño, porque no tienes nada que esconder, ¿verdad? No es tan diferente. Estas aplicaciones ven tus contactos, dónde estás, tus fotos, que comes, que ropa usas… la puerta de mi casa está abierta, ok. Pero igual le puedo poner un candado. O me puedo ir a otra comunidad.
Y sí, el teléfono nos vigila. Ahora que lo sabemos, ¿cómo podemos protegernos? Es importante protegernos en colectivo porque al final puedo tener Signal o lo que sea pero si ningún otro contacto mío está ahí, pues nos quedamos aislados.
Viéndolo realistamente, pues sí, estamos siendo vigilados… desde el procesador pasando por el sistema operativo y luego las aplicaciones. Eso no quiere decir que tenemos que hacerlo fácil. Cada vez más tenemos que retomar este control. Cada vez más nuestras vidas están cruzadas por estas mega corporaciones. Hay cosas que podemos hacer. Podemos entender cuánto estamos expuestos y cómo protegernos, dependiendo del riesgo que queremos tomar.
Irse preparando para dejar Whatsapp. Es un buen momento para preparar nuestros contactos, que es una aplicación que vulnera nuestro derecho a la privacidad.
Colectivamente podemos decir que otras herramientas podemos usar. Es importante conocer un poco más sobre derechos digitales, sobre cómo podemos cuidarnos en internet y que una manera de cuidarnos es también no usar programas que vulneran nuestros derechos. También podemos discutir y posicionarlo como algo político dentro de nuestras organizaciones, es algo importante.
Es una muy buena oportunidad para retomar el control y entender qué cosas sacrificamos al usar estas aplicaciones, porque siempre vamos a tener que sacrificar algo para tener estas comodidades. También podemos empezar a explorar alternativas.
La plática con los tres hackers ticos me dejó pensando en muchos temas…
Si tu quieres saber más sobre feminismos y tecnología, o simplemente quieres algunas respuestas para ese tío o tía, puedes consultar esta guía que nos compartieron con información valiosa al respecto.
Por Marty S. Minnich., IG martysminnich
Marty es guionista egresada del Centro de Capacitación Cinematográfica y forma parte del equipo de GIRE.
22 enero 2021