Todo mundo habla de la cuarta transformación que nos promete el gobierno de Andrés Manuel López Obrador. A unas semanas de su toma de posesión, en GIRE nos preguntamos: ¿Qué se necesita para lograr una verdadera transformación en México? ¿Transformación para quiénes?

Vivimos en un país injusto que atraviesa una situación grave y compleja de violaciones sistemáticas a los derechos humanos, impunidad y falta de acceso a la justicia. Desde el trabajo de GIRE, sabemos que esto afecta de manera particular a las mujeres.

Al día de hoy, no existen condiciones que permitan a las mujeres decidir sobre su vida reproductiva porque las acciones políticas en todos los niveles de gobierno han colocado a 51% de la población en situaciones de vulnerabilidad y discriminación.

GIRE presentó el informe La pieza faltante. Justicia reproductiva que muestra el estado de cinco problemáticas cuya atención es urgente para avanzar hacia la justicia reproductiva de las mujeres en México: embarazo adolescente, penalización del aborto, violencia obstétrica, muerte materna y seguridad social. Sabemos que la justicia reproductiva no es la única pieza para transformar el país, pero sí es fundamental para decir que hablamos de una democracia realmente justa e igualitaria.

En 2017, 390 mil niñas y adolescentes se convirtieron en madres, esto equivale a 1 de cada 6 nacimientos. De esos nacimientos 48.4% fueron no deseados: el embarazo adolescente debe ser abordado como un asunto de derechos humanos y de salud pública.

En México, se registra al menos una denuncia diaria por el delito de aborto mientras que el aborto inseguro continúa siendo la cuarta causa de muerte materna: la despenalización del aborto es urgente para evitar que las mujeres recurran a abortos inseguros y sean tratadas como delincuentes por interrumpir sus embarazos o tener abortos espontáneos.

Más de mil mujeres al día son violentadas durante el parto: es necesario que se diseñen e implementen políticas públicas que busquen erradicar y prevenir acciones u omisiones que constituyen violencia obstétrica, con un enfoque de género e interculturalidad.

Entre 2012 y 2016 se registraron 4 mil 283 muertes maternas, es decir, 857 al año: dos al día. Es urgente que la nueva administración establezca un conjunto de acciones prioritarias centradas en el acceso a servicios de salud para las mujeres en situaciones de mayor vulnerabilidad, como las mujeres indígenas, para evitar estas muertes prevenibles.

En México, 59.1% de las personas están empleadas de manera informal, la mayor proporción son las mujeres: 29 de cada cien mujeres pertenecen al sector informal, por lo que no tienen acceso a prestaciones de seguridad social. Estas prestaciones, como licencias de paternidad y maternidad, no cumplen con los estándares internacionales. Las estancias infantiles, por su parte, solo se encuentran disponibles para mujeres derechohabientes o para hombres en casos excepcionales: es prioritario constituir un sistema de seguridad social universal que no esté condicionado a un trabajo formal.

El panorama presentado pretende servir como punto de partida para determinar acciones concretas que permitan al Estado mexicano, en el contexto del cambio de gobierno, dejar atrás la inercia de considerar que los derechos humanos de las mujeres pueden quedar pendientes, y que temas como la corrupción y la impunidad no tienen relación con las experiencias que viven las mujeres todos los días.

GIRE presentó La pieza faltante con la convicción plena de que una verdadera transformación del país hacia una democracia más libre y justa no será posible si se deja de lado a las mujeres.

El informe está disponible aquí: www.justiciareproductiva.gire.org.mx