Ciudad de México, 24 de mayo de 2022
La muerte materna aumentó 37.9% de 2019 a 2020 en total impunidad
El Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE) e Impunidad Cero presentaron el informe Justicia olvidada. Violencia e impunidad en la salud reproductiva, un documento que analiza la situación de la violencia obstétrica en México, cuál es la respuesta que han dado algunas instituciones a las quejas y denuncias por esta situación y cómo poder combatirla desde una perspectiva no punitivista.
La violencia obstétrica es una forma específica de violencia contra las mujeres y otras personas con capacidad de gestar que constituye una violación de derechos humanos. De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones de los Hogares (ENDIREH) 2016 de 8.7 millones de mujeres que tuvieron al menos un parto entre 2011 y 2016 en México, 3 de cada 10 refirieron haber sufrido maltrato por parte de quienes las atendieron.
Para la elaboración del informe se enviaron alrededor de 510 solicitudes de información sobre las quejas o casos registrados de violencia obstétrica y muerte materna desde enero de 2015 a diciembre de 2020. Los resultados fueron los siguientes:
Entre enero de 2010 y enero de 2022, GIRE registró 50 casos de violencia obstétrica y muerte materna, documentó 23 y dio acompañamiento a 87 más. Las manifestaciones de la violencia obstétrica pueden ser tanto físicas como psicológicas. Las primeras incluyen prácticas que resultan invasivas, como las cesáreas —cuando se practican sin justificación—, la esterilización no consentida o forzada, el suministro injustificado de medicamentos, el retraso en la atención médica de urgencia o la falta de respeto a los tiempos de un parto. Entre las segundas se encuentran actos discriminatorios, uso de lenguaje ofensivo, humillante o sarcástico, falta de información oportuna sobre el proceso reproductivo y trato deshumanizado.
El reporte informa que la violencia obstétrica y las muertes maternas en México guardan una estrecha relación con las deficiencias estructurales que aquejan al Sistema Nacional de Salud y que constituyen un obstáculo para la atención médica integral de las mujeres y personas con capacidad de gestar durante el embarazo, parto y puerperio.
Las recomendaciones que se establecen en el informe señalan que para mitigar la impunidad estructural en casos de violencia obstétrica y muerte materna no se debe recurrir a medidas punitivas, y resaltan la necesidad de establecer medidas preventivas y de reparación a las víctimas.
El informe se puede consultar en: https://justiciaolvidada.gire.org.mx/
Para mayor información, contactar a Karen Villalobos en el correo: [email protected]